¿El desarrollo del niño empieza desde la concepción? ¿Por qué los cuidados y experiencias de la mamá embarazada pueden influir en el futuro de su bebé?
Los estudios demuestran que el cerebro del bebé se forma desde los primeros meses de embarazo con conexiones neuronales a gran escala. De esa manera, problemas como el bajo peso al nacer están muy relacionados con la calidad de experiencias que la madre haya tenido, además de la nutrición.
En encuestas hechas a 40 embarazadas de Bastión Popular, los resultados mostraron que, ante una buena calidad de relación con su familiar, es mayor la identificación con su rol materno.
Igualmente, de 6 entrevistas a profundidad hechas a mujeres puérperas sobre sus experiencias, las que indicaron haber recibido maltratos y poca ayuda durante su embarazo, manifestaron que cuando lograron alejarse de estas situaciones, pudieron disfrutar su embarazo y su estrés se volvió manejable.
A partir de estos resultados se crea el Programa Esperando a mi Bebé, para fortalecer el auto-cuidado, el acompañamiento prenatal y el vínculo afectivo con el bebé por nacer.
¿Por qué algunos niños hablan muy poco? ¿Hay una relación entre interacciones con el niño y desarrollo del lenguaje?
En tres centros infantiles de Guayaquil, se estudió las interacciones de las educadoras con los niños y se observó que eran muy pobres pues casi no hablaban y los niños lloraban muchas veces. También se evaluó el lenguaje de los niños y la mayoría tuvo bajos resultados.
Se hizo una intervención por tres meses para conversar más con los niños, contarles cuentos, cantarles, hacer títeres y, al cabo de ese tiempo, se volvió a evaluar a los niños.
Los resultados mostraron, luego de tres meses, un incremento en el nivel de lenguaje de los niños, en comparación con otro centro en el que no se hizo la intervención.
Esto nos da una prueba más de lo importante que es, en el día a día, prestar atención y escuchar a los niños, conversar con ellos, contarles historias, leerles cuentos, cantar y jugar con ellos.